domingo, 27 de marzo de 2011

El "Agua viva"


"Si conocieras el don de Dios y quién es el que te pide de beber,

le pedirías tú, y él de daría agua viva." (Jn 4,10)


"Sólo se busca lo que de alguna manera ya se ha encontrado" (S. Agustín)


Sólo se desea aquello que de alguna manera se ha experimentado.


Tu oración es tu deseo.


Jesús te te espera allí donde pones tu deseo.


Sólo él te descubre el "agua viva" que no buscas

porque no la conoces.


Así mi oración será como la de la mujer samaritana:

"Señor, da me de esa agua para que no sufra mas sed

ni tenga que volver aquí a sacarla." (Jn 4,15)


Sólo entonces dejarás tu "cántaro" cuando descubras el surtidor

de "agua viva" que hay dentro de ti.